Dulce Titina
Ya ha llegado el día de las bodas del Cordero. Su novia se ha preparado, y se le ha concedido vestirse de lino fino, limpio y resplandeciente. Apocalipsis 19:7,8
Los días pasan y el gran día se aproxima. La expectativa y todos los preparativos para la boda están en auge. Nunca pensé que este día llegaría tan pronto, al recordar los años de nuestra niñez en que crecimos y jugamos juntas parecen ser un simple sueño del pasado. Ahora mi Titina, toda una hermosa mujer lista para emprender este viaje que Dios ha diseñado para ella, me llena de alegría y emoción al ser parte de cada detalle y cada momento, hasta que esté frente al altar junto a Diego y todos testifiquemos su unión. A pesar de que hay tantos preparativos que coordinar y planear, también tenemos tiempos para disfrutar, como fue la despedida de soltera de Titina, donde pudimos compartir, reír, cantar y exaltar las cualidades de la futura novia. Entre lágrimas y abrazos, como es típico entre chicas, todas pudimos expresar nuestro amor para ella.
Todo esta expectativa me hace recordar que cada uno de nosotros estamos llamados a estar listos y preparados para las bodas del Cordero, cuando recibiremos al Rey de Reyes, que viene como el novio listo para reclamar a su novia, a la cual se le ha concedido vestirse de lino fino, limpio y resplandeciente. Y para con Él vivir felices para siempre.